Temprano una mañana, justo cuando salía el sol
Escuché a una criada cantar en el valle de abajo
"Oh no me engañes, Oh nunca me dejes,
¿Cómo podrías usar eso, una pobre doncella?"
Recuerda los votos que me hiciste de verdad.
Recuerda con qué ternura te acurrucabas cerca de mí.
Gay es la guirnalda, frescas son las rosas
He seleccionado cosas del jardín para atarlas sobre ti.
Aquí ahora deambulo solo mientras me pregunto
¿Por qué me dejaste suspirar y quejarme?
Pregunto a las rosas, ¿por qué debería ser abandonado?
¿Por qué debo permanecer aquí afligido?
A través de aquella arboleda, junto al manantial que corre
Allí hemos jugado tan alegremente tú y yo,
Besar, cortejar y divertirse suavemente.
Oh, mi corazón inocente has traicionado
¿Cómo pudiste despreciar tanto a una chica bonita que te ama?
¿Una chica bonita que te ama tanto y con tanta calidez?
Aunque la locura del amor no es más que una fantasía,
Aún así debería resultarme más dulce que tu desprecio.
Pronto conocerás a otra linda doncella.
Alguna doncella bonita, la cortejarás por un tiempo.
Así, siempre oscilando, girando y cambiando
Siempre buscando una chica nueva.
Así cantó la doncella, lamentando sus penas.
Así cantaba la pobre doncella en el valle de abajo.
"Oh no me engañes, Oh nunca me dejes,
¿Cómo podrías usar eso, una pobre doncella?"